Et Nada

¿Qué estás buscando?

Abracadabra
Abracadabr
Abracadab
Abracada
Abracad
Abraca
Abrac
Abra
Abr
Ab
A

Ey! consume sin miedo O%

Todo edulcorado

{Òjó}

Galimatías

El diletante

Hexagrama 4, te busco.

Ecce Homo

-Quinto "D"
-Quinto "D" de Dedo?
- No, quinto "D" de Dios.

Haciéndonos los Boludos, como perro al que se están cogiendo.

Si ya has dado a alguien, dame también a mí; si no, empieza conmigo. D.e.S

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Odio las moscas. Revolotean evocando vida y muerte. El calor, la putrefacción, el hedor y las moscas se alinean como planetas, para hacer mi verano imposible.
Quiero explotar, quiero manifestar mi potencial. Pero así me encuentro, sobrepasado por las circunstancias, solo soy sombra de una sombra.
Destrozar mi sombra, mudar de piel, en la primavera se siembra.
Mi pensamiento se disipa, como con los cuatro hijos idiotas de la familia Mazzini-Ferraz y todo pierde sentido se vuelve banal. Conversaciones circulares, ya soy experto en previsiòn climática. Busco desesperadamente a mi amiga soledad.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Desde un peñasco de cemento


En la claridad lejana se clava un rayo cósmico, abducido. Retoba y corcovea al abismo sideral, más nunca escapará. Delirio Universal el Papa duerme con Satanás. Dios, sube la apuesta y se unió a Eva mitocondrial. En el quilombo Eliseoidal los dioses vivan la pepa. Este oasis Infernal, manantial de agua Sagrada, Ríos que no llegan al Mar.
Sobre estos hombros de gigantes no observo más que oscuridad.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Te triplicamos la carga si seguís siendo K, Klaro Komo el Agua

..."Fue una noche rara. En un momento dado no se sabía bien el porqué de algunas presencias ni la causa de otras ausencias. Por lo tanto, no debería extrañar que la fallida sesión de la Cámara de Diputados que finalizó en la madrugada del jueves, en la que el oficialismo buscaba con desesperación la media sanción del proyecto de ley del Presupuesto 2011, vaya en camino a convertirse en un escándalo de consecuencias imprevisibles. Las denuncias de las diputadas Elsa Alvarez y Cynthia Hotton sobre el ofrecimiento de coimas por parte de funcionarios del Gobierno amenazan con ocasionar un terremoto político. “Cuando Carrió dijo lo de la Banelco sabía muy bien de lo que hablaba”, reconoce un legislador opositor que conoce la trama de una noche en la que parte de sus secretos aún no han sido develados. “A mí también me llamaron; y como a mí, a otros. Me ofrecieron 50 mil pesos; dije que no”, reconoce otro legislador de la oposición, quien (más allá del off the record) debería asumir la responsabilidad de la denuncia formal ante la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara baja y la Justicia. “Empezaban por 50 mil, pero si uno pedía que le agregaran un cero más, te lo daban”, amplía otro legislador que rechazó la propuesta indecente.
El Gobierno hizo, hasta aquí, lo mismo que otros antes: negó todo y se lanzó a descalificar las denuncias y a los denunciantes. La realidad parece ir por otro lado. Las denuncias de las dos diputadas que se atrevieron a hablar públicamente tienen alto grado de verosimilitud. Las otras, también."... Nota completa



Me llegó un mensaje de texto me ofrecieron el triple con mi próxima recarga de $5 si seguía siendo K. Pero obvio no lo acepté.

Para La Nación hay 100.000 millones para manejar discrecionalmente, éstos coimeros K son muy ratones, ¿cómo van a arrancar con unos míseros 50 mil y seguramente en pesos. Así no, así no!

viernes, 12 de noviembre de 2010

2011

¿C. Kirchner - A. Kirchner ?. K-K, ¿Por qué le están dando tanto micrófono a la ministra?. Me gusta, pero quizás haya que casar a la Reina con algún Príncipe de otra región.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Ernesto Boludo Guevara

El país de los boludos
Por José Pablo Feinmann (25-9-99)
 
Bastará con verificar que –en el lenguaje de los jóvenes, sobre todo– la palabra boludo ha reemplazado al modismo, típico de la argentinidad, che. Hoy, los jóvenes no dicen: “Cortala, che”. No dicen: “Ni ahí, che”. No dicen: “No me cabe, che”. Los jóvenes dicen: “Cortala, boludo”. Dicen: “Ni ahí, boludo”. Dicen: “No me cabe, boludo”. Pareciera, la palabra “boludo”, un reconocimiento (tal vez no consciente) del estado de las cosas, no un agravio. Pero no nos adelantemos. En principio bastará con verificar este decisivo desplazamiento lingüístico: del tradicional “che” se ha pasado al “boludo”, extrayéndole toda connotación agresiva para, limándolo, mantenerlo en el nivel referencial. Así, cálidamente, se dice: “Escucháme, boludo”. O “no vayás, boludo”. O “el bondi te deja mejor que el subte, boludo”.
Nadie ignora todo lo que un buen chiste expresa de una situación social o política. Los chistes que ha generado el menemismo son interminables y todos dicen algo de la situación básica que los ha producido: el menemismo, por supuesto. Pero yo elegiría uno entre los más destellantes y representativos. Uno en que la palabra “boludo” es decisiva y denota una situación histórica. Un tipo le dice a otro: “¿Sabés cómo le dicen a Menem?” El otro tipo dice: “No”. El primero dice: “El rey de los boludos”. El otro pregunta: “¿Por qué?”. El primero explica: “Porque él es el rey y nosotros los boludos”. La gracia del chiste (si me lo preguntan, creo que se trata de un chiste muy gracioso y bien armado) radica en atribuirle, primero, a Menem, una expresión tradicionalmente despectiva: sería, en efecto, “el rey de los boludos”, es decir, el más boludo de todos, el más tonto, el más idiota. Sin embargo, luego, sorpresivamente (un chiste siempre, o casi siempre, esconde un remate sorpresivo), la expresión “el rey de los boludos” deja de ser despectiva y es valorativa, porque “el rey de los boludos” es un rey, es un monarca, alguien que gobierna y, como todo monarca, tiene súbditos. Estos súbditos tienen un nombre, que primero creíamos se atribuía al rey, pero no, no se atribuye al rey sino a los súbditos: porque “los boludos” son los súbditos, los súbditos del rey. De este modo “el rey de los boludos” es el monarca que ejerce poder sobre una especial categoría de súbditos llamados “los boludos”. Que somos, más exactamente, nosotros. El chiste, que en el inicio parecía agredir o señalar peyorativamente a Menem, nos señala, en su remate, a nosotros: los boludos somos nosotros y él es el rey, el monarca, el que nos transforma en boludos gobernándonos. Porque si por algo somos boludos es porque Menem es nuestro rey. Y lo hemos elegido.
Cuando alguien escucha este chiste se ríe, jamás se indigna. Nadie dice: “Yo no soy un boludo ni Menem es mi rey”. No, los buenos y sufridos (y boludos) argentinos nos reímos y decimos “qué buen chiste, boludo”. Y nos asumimos como boludos y ya está claro por qué hemos dejado de decir “che” para señalarnos y ahora decimos “boludo”. Porque es así: antes nos señalábamos diciéndonos “che”. Por ejemplo: un amigo, luego de despedirse, se va del bar y de pronto descubrimos que hemos olvidado decirle algo. Lo llamamos. Le gritamos “¡Che!”. No más. Ahora le gritamos: “¡Boludo!”.
Todo esto no lo digo porque sí. Se me ocurrió, como muchas otras cosas, tomando un café en el bar de la esquina de mi casa. Estoy con un amigo y mi amigo lee el diario. Lee los sucesos de Ramallo. Que la bonaerense acribilló a los secuestradores y a los rehenes. Eso lee. De pronto, me dice que el comisario a cargo declaró que le habían tirado a las gomas. A las gomas del coche en que se escapaban los asaltantes con los rehenes. Tiraron, parece, entre ochenta y ciento setenta balas. Ni una le pegó alas gomas. Mi amigo me mira y pregunta: “¿Nos toman por boludos?”. Le digo que sí, que por supuesto, que nos toman por boludos. Que hace tiempo nos toman por boludos. Tanto, que los argentinos ya no somos los “che”, somos “los boludos”.
Cuando Alsogaray decía “hay que pasar el invierno”, nos tomaba por boludos. Y después Onganía, y Lanusse, y el viejo Perón muchas veces, nos tomaron por boludos. Y cuando Videla decía “los desaparecidos están en el exterior” nos tomaba por boludos. Y cuando hablaron de la “campaña antiargentina” nos tomaron por boludos. Y cuando hicieron el Mundial y cuando le ganamos a Perú seis a cero nos tomaron por boludos. Y Alfonsín nos tomó por boludos cuando les dijo “héroes de Malvinas” a los carapintadas, y nos tomó por boludos cuando dijo “la casa está en orden”. Y Menem se hartó de tomarnos por boludos. Nos tomó por boludos durante más de diez años. Menem y los Yoma y María Julia Alsogaray y los que mataron a Cabezas y los que suicidaron a Yabrán. Todos nos tomaron por boludos. Y ahora los de LAPA y los acribilladores de Ramallo y los que ultrajaron tumbas judías en La Tablada y, antes, los que volaron la Embajada de Israel, los que volaron la AMIA esos –muy especialmente esos– nos tomaron por boludos. Y quienes los cobijan, quienes deberían descubrirlos y encarcelarlos y no lo hacen, esos, día a día, cada día que pasa un poco más, nos toman por boludos. Porque eso es lo que somos, porque al fin sabemos lo que somos: somos el país de los boludos. Hoy, al comandante Guevara no le dirían Ernesto Che. Le dirían Ernesto Boludo. Y no por culpa de él, sino nuestra.
Mi amigo, ahí, en el bar de la esquina, tristemente dobla el diario y lo deja sobre la mesa. Llama al mozo. Pide un café. Veo en sus ojos el destello de la bronca. De la indignación. Tal vez de la rebeldía. Me mira. Y dice: “No se puede seguir así”. El mozo le trae el café. Bebe un lento sorbito, con cuidado, como para no quemarse. Me mira otra vez y dice: “Hay que hacer algo, boludo”.Es un comienzo.

¿Será este el comienzo?

miércoles, 27 de octubre de 2010

Y ahora qué? Qué huevos guacho qué huevos! te quiero.

Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?
Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?Y ahora qué?

lunes, 25 de octubre de 2010

Mi Uno, Doble Moral y el peligro de que todo sea en Vano

¿Cuántos Unos habrá en la Tierra? ¿Cuántos en el Universo?.
Todo el mundo escupe sangre a veces corazón!
¿Cuánta mierda habrá que tragar?, ¿Cuánto tiempo resistirá el pecho antes de estallar?
Todo el mundo escupe sangre a veces corazón!

¿Cuántas vueltas habrá que dar al círculo?, ¿Cuántos kilómetros tras zanahorias de cartón?.
Todo duele más cuando no te hallo... porqué.
¿Y si nunca alcanzas eso que tanto anhelas, eso que ni siquiera sabes qué es?.
Todo duele más cuando no te hallo... porqué.

¿Y si nunca alcanzas aquello que tanto anhelas?
¿Y si nunca alcanzas aquello que tanto anhelas?
Este cáncer espiritual que deglute el alma, estas dudas corrosivas, acumulativas.
Este vatercló de porcelana, cárcel de ratas que mueren ahogadas.

Tanto miedo a no-ser. Profecía autocumplida.
Condenado a un amanecer eterno, en la dictadura de la Hipocrecía.
¡Oh!, Universo de apariencias, máscaras y disfraces.
Tu hedor enferma, pero no es mierda a lo que apestas, sino, a mentira.

domingo, 24 de octubre de 2010

Por azar, el edulcurado alemán



El punto más alto de la noche, bien temprano, por azar. Luego todo en descenso. Hasta la aparición del Lucero del Alba quién anuncia al Magnánimo

sábado, 23 de octubre de 2010

Dios no llora, se mea de Risa

¡Dios no llora, se mea de Risa!, fue la sentencia que se oyó como el estruendo de un rayo en los alrededores de la plaza. Era el curandero Parópio en las escalinatas de la Catedral, ante un par de palomas que intentaban montarse entre sí y una multitud de ratas nerviosas, que desde enfrente, observaban atónitas la danza pagana  que con aires operísticos realizaba el viejo harapiento.

La Gente que pasaba frente a Él lo observaba; algunos con indiferencia, otros, reían al ver como el viejo tambaleaba en una especie de ritual ancestral. Pero nadie comprendía cómo, con tan paupérrimo semblante, no caía por las escalinatas.

Este Diógenes moderno; cínico entre los cínicos, beodo eterno, loco perdido con tantas convicciones; era cual Noche al Día, Mal al Bien, Diablo al Dios,  para ésa Gente alienada con sus miradas de vacas perdidas en un verde mar.

Era todo lo que Ellos debían ver para reafirmar sus convicciones, para sentir que sus vidas valían la pena, para llegar a sus hogares y estar felices de tener uno, para disfrutar todas las comodidades del hombre civilizado, para exitarse al encontrar a su mujer arreglada para ése trámite que seguro vendría luego de cenar, luego de ese beso en la frente a sus hijos, de esa charla banal, de una dosis de Tv, de ese juego presexual que ambos aborrecen. Finalizado el sexo, quizá volverían a pensar en ese Loco, y con una mueca en la cara llegarían al sueño profundo que visita a los conformistas.

Puede que sufran pesadillas, quizás sean con el Loco Parópio pero al despertar sus ojos percibirán todo su entorno, y nuevamente se enamorarán de la persona que está a su lado, se sentirán felices por sentir el abrazo desinteresado de sus pequeños, amarán sus casas; sus autos, sus baños, sus ropas. No dudarían de la felicidad que sienten, que es lo auténtico,  lo original,  lo único. Como así también son únicas; sus casas, sus autos, sus ropas, sus estúpidos y obviamente únicos golden´s retriever, sus anteojos edición especial.

Parópio, ahí desde las escalinatas comprende el error. Todo es igual. Él, también se creyó especial, loco, fuera de serie, outsider. Y se sintió feliz, y creyó haber hallado la senda. Hasta que se derramó sobre si otra parte de la realidad, vio que no era el único. Eso fue suficiente. Dejó todo lo que creía que lo hacía único, comenzó a hablar solamente con los animales, llegó el tedio y tuvo un último pensamiento. Comprendió la tragedia y la comedia. Dios no llora, se mea de Risa.

Rezo por mí




La indómita luz
se hizo carne en mí
y lo dejé todo por esta soledad.
Y leo revistas
en la tempestad
hice el sacrificio
abracé la cruz al amanecer.
Rezo, rezo, rezo, rezo.
Morí sin morir
y me abracé al dolor
y lo dejé todo por esta soledad
ya se hizo de noche
y ahora estoy aquí
mi cuerpo se cae
sólo veo la cruz al amanecer.
Rezo, rezo, rezo, rezo por vos.
Y curé mis heridas
y me encendí de amor
Y quemé las cortinas
y me encendí de amor, de amor sagrado.
Y entonces rezo.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Abeja suicida

No puedo dejar de pensar con que empeño  la abeja intenta suicidarse.

Sí, definitivamente, es su deseo más profundo. Pero, es una abeja mielera, ¿por qué está sola?

Vuela contra el vidrio transparente que le hace ver su Libertad, pero a la vez cumple la doble función de barrera infranqueable.

Tiene la posibilidad de escapar. La ventana no está cerrada ... si solamente mirara por debajo de su nariz.
¿Pero, qué estoy diciendo? , si las abejas no tienen nariz, Simio que decís!.

Tomo dos panes congelados y los coloco en el microondas, vuelvo a estudiar. Espero el sonido que me haga  regresar a la cocina. Ahí está, vuelvo saco los panes, me confundí de función, están duros como piedra.

Oigo el zumbido desesperante. Miro el ventiluz, ahí sigue atrapada. Pienso intervenir, salvarla. ¿Pero quién soy para intervenir en el devenir de la Naturaleza?.
Alejo mi mano y dejo que siga chocando contra el vidrio.


Pasan lo minutos, ella empecinada en burlar a la Naturaleza y traspasar el vidrio. Afuera todo parece tan perfecto, armonioso y bello. Las golondrinas danzan, los gorriones hiperquinéticos saltan de un lado a otro, las palomas se aparean impúdicamente.Y ella parace tan frágil adentro, luchando contra semejante vidrio, todo es tan terriblemente humano, tan lleno de peligros para esa pobre abeja.

Intento calcular el tiempo que podría estar aleteando hasta acabar con su vida.

Oh!, veo que decidió vivir, vuela hacia la colmena.

También veo a las nobles golondrinas volar eufóricas.

domingo, 17 de octubre de 2010

Me amariconé, que le voy a hacer.



Colores Verdaderos
Tu, con los ojos tristes
No te desalientes
Oh!, me doy cuenta
Es difícil tomar valor
En un mundo lleno de gente
Puedes perder la vista de todo
Y la oscuridad dentro de ti
Puede hacerte sentir tan pequeño

Pero yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris

Entonces enséñame una sonrisa
No seas infeliz, no puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Llámame
Porque tu sabes que allí estaré

Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris

No puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Llámame
Porque tu sabes que allí estaré

Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Colores verdaderos
Colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris

sábado, 16 de octubre de 2010

Sentir hasta resistir




Me vas a hacer feliz
vas a matarme con tu forma de ser.
Me vas a hacer reír
vas a matarme con tu forma de ser.
Me vas a hacer feliz
vas a mostrarme ese lado inconcluso.
Me vas a hacer reír
vas a mostrarme lo que no puede ser.
Me vas a hacer feliz
vas a matarme con tu forma de ser.
Me vas a hacer reír
vas a matarme con tu forma de ser.
No voy a desistir
aunque me digan que todo es tan iluso.
No voy a desistir
aunque me digan que ya no hay nada más.
Sentir hasta resistir
el karma de vivir al sur
Sentir hasta resistir
el karma de vivir sin luz.
Yo se que un día ya no habrá perdón
yo se que un día no habrá confusión
porque si confías en mí
todo estará siempre.
Me vas a hacer feliz.

viernes, 8 de octubre de 2010

Amontonando esperanzas paso la vida





Con mi yunta de nuncas. José Larralde



Amontonando esperanzas paso la vida
sabiendo que mañana es otro día
no importa los que fueron ni los que vienen
los viejos ya tuvieron, los nuevos tienen
tienen otros anhelos que son los mismos
fundidos en la nada de un espejismo
tienen rota la idea, tienen prejuicio,
tienen siglos de brazo y de estropicio
Tienen ojos que miran, pechos que sienten
y alguna que otra encía que muestra un diente
Amontonando sueños paso la vida, descanso trabajando
como fatiga
soy maestro de miseria, pájaro y rama y a veces
soy yo mismo montón de nada
otras veces soy perro siguiendo al amo
y si tengo una herida solo me lamo
por razón que no entiendo a veces ladro
tal vez pa´ ver si existo y seguir ladrando
total abro la boca y brota el sonido
y a vece otro perro ladra conmigo

Aprendí cabestreando a hacerme viejo
y arrastré a la sidera más de un consejo
He sacado del pantano tanto cangrejo que ahura
hasta pa´ sentarme reculo al cejo
Amontono esperanza, por eso vivo,
je, gracias a Dios fue gratis haber nacido
Lo cierto es que soy cierto y basta con eso,
si andás analizando se gasta el seso
y al final la zozobra te invade el pecho
y del cierto a al duda se agranda el trecho
Por dudar de mí mismo, viví sangrando y...
y en cada cajuarones pensé hasta cuando
reventó la respuesta altiva y muda
y la madre indiferencia me dio su ayuda
ayuda pa´ estar solo, ayuda inerte
disprecio por la vida, asco a la muerte
Nido de luces malas viviendo oscuras y en cada sol naciente
verla huesuda
estar como tranquera sin alambrado
con huellas que me cruzan por el costao
rasquetón pa cualquiera que ande sarnoso,
pión de lunes a lunes, tumba y sancocho
guacho de padre y madre, reconocido hijo
hijo pa´ dar el brazo guacho pa´ recibirlo
soldado de la herramienta siempre de guardia
yo custodio la huerta, carpo la sandia.
Y en cada caladura que el tajo sangra
su negra dentadura me muerde el alma
Patrón de mis miserias talón de suela,
mis miserias se quedan mi años vuelan.
Un día pulsé un sueño y canté mis penas
con cuerdas arrancadas de mi arterias,
de clavija mis dedo, mi pecho caja
diapasón fue mi brazo, mis ojos, pampa.
Canté, canté y canté a los gritos
mi fe y mis ansia, me miraban las aves como asombradas
titilaba el lucero y el pasto alzaba sus dedos diminutos como una gracia
todo el mundo reía, todos cantaron
las cuerdas de mi sueño, me las cortaron
patrón de mis miserias sigo el camino con mi yunta de mansos
con mi yunta de mansos cincho al destino
y amontono esperanzas, por eso vivo,
gracias a Dios fue gratis haber nacido.
Y amontono esperanzas, paso la vida,
sabiendo que mañana es otro día.
Patrón de mis miserias,
sigo el camino, con mi yunta de nuncas cincho al destino
patrón de mis miserias, talón de suela
mis miserias se quedan mis años vuelan.

miércoles, 6 de octubre de 2010

La empanada de Damocles


Todos deseábamos con bestial frenesí a Martita. Martita era la Reina de la Noche, buen par de gomas, culo parado, flequillito, ropas estrechas y siempre dos o tres latigillos en la punta de su lengua que te hacían temblar los cimientos.

En medio estaba Juan, todos éramos amigos de Juan. Él era el típico idiota del grupo, que, a pesar de todo, tenía "ese encanto" que solamente ellas logran descubrir.

Todos éramos militantes de la  A.M.B.Q.M. (Agrupación mas buenos que la mierda). Eran tiempos de lecturas maratónicas. Nos desvivíamos por engullir todo el conocimiento que nos era asequible. Entre ellas, la anécdota de Damocles.

Cuando Martita llegaba a nuestra Cajita de Marfil el clima  cambiaba de forma drástica, así como lo hace el viento Sur en la Costa Atlántica. Pero ella no era frío ni anunciaba el temporal, más bien todo lo contrario. Ella, anunciaba el calor, el deseo, el apetito carnal, en fin, nos ponía al palo. Tenía esa potencia de un saque de la más rica merluza, el mundo se achicaba ante tus pies, tu voz resonaba como la del discurso fúnebre; poderosa y persuasiva, sentías el poder de conquistar el mundo.

Ahí nos encontrábamos, rodeándola, sirviéndola, buscando por cualquier medio una pizca de su puta atención. Pero ese estilo de hembras, si que saben de ardides para contener un rebaño de carneros en celo.

A Juan en cambio, nunca le prestábamos atención. En medio de sus charlas, siempre aparecía el irrespetuoso que, como si Juan no existiera, cortaba en seco su conversación para arrancar con un tema nuevo. Juan callaba, y nadie era capaz de ubicar al gil, para que Juan pudiera terminar sus palabras. Siempre se lo hallaba con el pensamiento perdido quién sabe dónde. Era de pocas palabras, algo tímido quizá. En su rostro se dibujaba como una perpetua preocupación, algo que lo perseguía sin darle respiro. Nosotros, no entendíamos cómo Juan no era feliz, con la Perra que tenía a su lado.

Una tarde de primavera, luego de oír el  golpe seco de la puerta de nuestra Cajita de Marfil ingresó -como lo hacía siempre- el viejo Sileno. Era una especie de guía espiritual de nuestra agrupación. El hombre de las cien batallas, quién encabezó la resistencia en los años 70. Enigmático, borracho pero sabio. Se dice que cuando estaba ebrio poseía una sabiduría especial y el don de la profecía. Siempre andaba harapiento, descuidado en su aspecto, era alto y panzón, algo calvo y con una prolongada  barba, de 30 años como solía decir.

Así como fue de imprevista su visita, también lo fue, la frase que espetó.

- No caguen mas alto de lo que les da el culo, pendejos!.

Luego, desapareció.

Todos quedamos con esa frase en forma de eco revoloteando sobre nuestras mentes.

Traté y traté durante muchos días de encajar la frase en algún cuadro, pero era inútil, hasta que dejé de pensar en ella.

No fue sino hasta después de varios meses de insistencia que logré comprender lo que era estar junto una hembra como Martita. Me vi en el espejo, y ya no era más yo, era el tipo amargado que tanto envidiaba.

domingo, 3 de octubre de 2010

Entre el Ser y la Nada

La jaula de la conciencia



Los límites de la percepción.


 Esos pájaros de la noche, que oímos cantar y nunca vemos. Ese diablo que mea en todas partes, y en ningún lado hace espuma.

¿Por qué el domingo es azul?, porque el azul es frío, porque el océano es; abismo, inmensidad, mayestático, único.

Because the sky is blue
It makes me cry
Because the sky is blue ah

No te pongas azul

Don't turn blue
In a good friend's bathroom
Don't try to reach the moon
Trough the things
that go on
In the dark room
Don't let your heart not burst
Just because you must hide
We
all know,we all know, we all know
That real life is inside

La fiebre de un sábado azul
y un domingo sin tristezas.
¿El azul es frenesí?, o todo se lo debemos a Picachu

Porque estoy condenado a ser libre, porque la exístencia precede a la esencia, porque cuando asumo que soy responsable de mi vida me causa espanto y grito




Porque cuando logro la paz y quiero observar el panorama, descubro la niebla.



¿Y dónde estoy yo, y dónde estás vos?


jueves, 30 de septiembre de 2010

Siento al caminar, toda la piel de América en mi piel



Canción con todos
(Letra: A. Tejada Gomez - Música: Cesar Isella)

Salgo a caminar
por la cintura cósmica del sur,
piso en la región,
mas vegetal del viento y de la luz;
siento al caminar
toda la piel de América en mi piel
y anda en mi sangre un río
que libera en mi voz su caudal.

Sol de Alto Perú,
rostro, Bolivia, estaño y soledad,
un verde Brasil,
besa mi Chile, cobre y mineral;
subo desde el sur
hacia la entraña América y total,
pura raíz de un grito
destinado a crecer y a estallar.

Todas las voces todas,
todas las manos todas,
toda la sangre puede
ser canción en el viento;
canta conmigo canta,
hermano americano,
libera tu esperanza
con un grito en la voz.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Domingo 7 am

Aprieto lo dientes, y miro a los dementes. Aprieto los dientes, y miro a los dementes. ¿Y dónde estás vos, y dónde estás vos ?

Aprieto los dientes, y un calor de mentes. Aprieto los dientes, y miro a occidente. ¿Y dónde estás vos, y dónde estás vos?


miércoles, 15 de septiembre de 2010

Neófitos

Ni tan poco, ni tan mucho. Ayer, cerca de las 16 hs. llegábamos a la Gran Capital. Recorrí por primera vez en mi vida la tierra más cara del país, bendito Puerto Madero. Lleno de sus coquetos elementos. Todo muy gourmet.

Bajé del micro y no pude más que sumergirme en una profunda meditación, absorto en casi todo lo que me rodeaba, súper edificios, pulcritud, lleno de guindillas con sus ropas color caca, mucho yogui tomando yogurt en los bancos perfectos de cara al Sol.

Arribamos a la plaza, y a soportar la espera para el ingreso. Todo de acuerdo, claro, a la importancia de la agrupación en la que milites. Ya que, si estás en una de las princinpales, todo se facilita. Como todo en la vida.

Mis expectativas eran altas. Tenía la esperanza de que el acto fuese de algún modo, inmaculado, pero éste es uno de mis principales defectos, soñar maravillas.

Ya en el viaje comenzó mi decepción. Los cabecillas, siguen el estereotipo de cabecilla. Cortes de pelo, estilos de ropa, actitudes. Todos con ese inocultable deseo de ser protagonistas, de mostrar en la cancha porqué se ganaron su puesto. Entre ellos, muchas caras de lagartos, marimbas y alcohol.

Cada acto -más allá de lo simbólico- es una lucha. Una lucha entre cabecillas por un saludo, un palco, un teléfono, una foto. Ello quizá sea natural e intrínseco a la lógica de la actividad política, pero lo cierto también es que, cuanto más visible sea esa "lucha por el poder" menos mística podrá ser recogida.

Hoy todos hablan de la Mística del acto de ayer, en mi caso personal, lo único que me emocionó fue el comienzo. La aparición de los dos líderes y esa caricia mutua.

Todo lo demás lo sentí muy encajado, todo era muy visible, las luchas quedaban al desnudo. Burgueses, Pobres y Sindicalistas.

La militancia sumamente atomizada, desenmascara el individualismo con el que fuimos criados. A pesar de que hay algo ahí, los valores huelen rancio. La razón de ser de las organizaciones, no es cumplir un rol social, sino, elevar en protagonismo a su conductor.

Nuestra fuente de valores no fueron los 60 o 70, fueron los 90.

Nuestros maestros directos, no son los que cargamos en la remeras. Las remeras, las banderas, los tatuajes son ilusión.

Demos tiempo a los neófitos.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Sueños húmedos

Es viernes por la madrugada, ya no recuerdo cuanto tiempo hace que estoy dando vueltas en la cama y Morfeo que no llega. Tomo el celular, la luz irrita mis ojos, son las 2 de la mañana. La soledad se hace sentir, me incorporo de la cama.

Voy al baño, acomodo mis cabellos, esparzo perfume, visto mi cuerpo y con toda la valentía que logro reunir me dispongo en dirección a el bar más cercano.

Entro y noto algo distinto en mí. Me muevo con más libertad, no calculo cada paso, soy espontáneo. Me turba creer que puedo ser todo aquello que siempre pretendí y que hasta ahora nunca me había atrevido ser.

Aquel individuo, que mi mente contiene con tanta fuerza, hoy parece haber soltado amarras. La noche desde aquel insomnio, se torna de forma progresiva en cuento de hadas. El ambiente es ideal, el corral es grande, la música melancólica, la luz tenue y solo una pequeña nube de humo se observa a contraluz.

Una banda se dispone a conectar su equipo. Los observo, mientras bebo un vaso de agua con dos hielos. En eso mi vista se cruza con Ella. Esa morocha que días atrás había cruzado por la iglesia y no había podido apartar mi vista de sus tetas. Ella, como todas, no se había percatado de mi cuidadoso examen.

Pero esta noche, parece cortar el hilo que me ata con toda mi vida pasada. La morocha en cuestión, me mira.

Me mira, y yo no tengo pudor en sostener su mirada, hace una leve sonrisa y corre su vista. Mi metabolismo se acelera, mi cuerpo estalla en miles de convulsiones hormonales. La mente se hace blanca y en un instante estoy a su lado, flitreando como un casanova. Ella, ríe y sigue cada una de mis aburridas peroratas. Tomo confianza en mi nuevo traje y me afirmo. Ya soy Ése otro, y todo es, tal cuál creí que podía llegar a ser.

Tomo su brazo y no opone resistencia, entonces, como en una película de James Bond, directamente tomo su nuca entre mis manos y le doy el más apasionado beso que jamás creo haber dado. Comprendo que la agitación es mutua y le propongo ir hasta mi departamento que queda a unas pocas cuadras del lugar. Acepta sin ninguna condición.

Estamos en el ascensor, ella está encendida, me besa y frota mi pija contra su culo. Entramos, todo indica que no vamos a hablar, es así que, trenzados en besos de pasión nos desnudamos el uno al otro y sin interludio comienzo a penetrarla violentamente, quería que fuese rápido, fuerte, animal. Su cuerpo me indica que está atravesando el orgasmo, lo que me invita a llegar al mío también. Asisten las convulsiones, el éxtasis, el arrebato, la fascinación. Retiro mi pija y en el último esfuerzo expulso todo mi semen. Pero hay algo raro, siento mojada mi entrepierna. Me despierto. Levanto la sábanas veo el lamparón en mi calzoncillo y sigo soñando.

viernes, 10 de septiembre de 2010

En el comienzo todo fué nada

En el comienzo todo fué nada. No existías, para mí. Pero tu surgir hizo de esa nada el todo, para mí. Ahora creo que hay algo por ahí, que cuando lo hallo siento que soy feliz.

Pero como te pierdo con habitualidad, el todo se hace grande, para mí. Tanteo la soledad y se percibe abismal.

Hace mucho frío, por aquí. Mi cuerpo víbra, mís manos no sienten, mi nariz llora, mi pito es un maní.

Oigo que los fantásmas vienen por mí, está todo tan oscuro aquí.
Te busco, en todas direcciones pero no te hallo salida.Te busco, y pude que seas, solo la respuesta a una pregunta.
Concluir mi rompecabezas, darle un sentido a todo ésto.

La bravura de esta angustia sin fin, no debería haber sido creada para mí. Tales abísmos, sordos, grandiósos, retorcidos, divinamente negros, silenciosos , ya son familiares para mí.

Así, aprendí a hablarme a mí. Oh! compañero de infinitas tertulias, conocedor de mís más profundos secretos, amigo aún en esas situaciones en las que no exíste la palabra amigo. Aquí te tengo, dentro mío. Y aunque no sepa, si tú me dominas a mí o yo a tí. Se que siempre estarás adosado a mí. Seremos como el día y la noche, como la vida y la muerte, como la alegría y la tristeza. Sempiternamente juntos hasta el fin.

Sé que hoy no camino solo, sé que el camino está ahí. Pero me estremece pensar que no tenga fin. Y yo allí contigo en medio de un camino sin fin. Y ella sin encontrarme a mí, y nosotros, sin encontrar a ella. Una divina tragedia, para mí.

No sé qué esperanzas me hacen persistir. Ya que, si yo desistiera seguir, tú hermano mío, no podrías vivir. Pero la vida me tira las sobras por ahí. Me da vuelta la manija y me hace seguir.

Y acá estoy, otro día que se hace noche, y la luz que no alcanza para mí. Ése mísero y cobarde destello que exhibió la oscuridad expiró. Me zambullo en el mar negro. Ya aprendí a nadar, pero el agua es la peor pócima del mal .

miércoles, 18 de agosto de 2010

De putonas y nenes bien

El Templo. Un lugar oscuro, donde el mínimo fotón del luz se hace visible. El humo es asfixiante, que junto al calor hacen del ambiente un lugar difícil de tragar. Las caras, en series. Todos, vivos de puros, vivos de porros, vivos de alcohol hasta vivos lookeados.

La escena aparenta sublime. Las sirenas visten especial. Todas esas gatas putonas, buscan algo que nunca encontrarán.

Los lobos, siempre al acecho. Desplegando todo su arsenal seductor. Movimientos pélvicos, vaso siempre en mano, risas forzadas, frases de ocación, vestimenta adecuada, conversaciones en voz alta.

Me encuentro con gente. Gente que, algunos quiero ver, otros no. De todas formas saludo cordialmente a cada uno de ellos.

Estoy con dos personas, uno ya vastante ebrio, el otro, algo, pero su personalidad lo transforma en una rareza. Yo algo alcoholizado.

Trato de huir de la aglomeración. Corro hacia el toilette. Veo tres espectros, uno inhala un payaso, otro vomita salchichas y el tercero se moja las manos obsesionado en recomponer su peinado. Apoyo mi vaso sobre una tabla al momento que desvío mi vista hacia el piso convertido en un charco sucio. Desprendo mi cremallera, retiro mi miembro y me dispongo con paciencia oriental a mear el mingitorio. Cierro mis ojos, dejo que los músculos se distiendan para que comience a fluir así esa sopa amarillenta.

Empujo la puerta, que se abre violentamente, salgo despedido me choco con un pseudo-sesudo-guevarista-burgués, sigo mi camino. Me observa consternado, ante mi falta de códigos civiles.
Llego al terreno que dominamos - a pura fuerza bruta- los encuentro absortos, cada uno como perteneciente a un mundo distinto.

Una gorda simpática camina hacia nuestra dirección, balbucea unas palabras que no logro entender. Recorre el paisaje con la mirada y huye espantada. Mi amigo el raro, con su miembro en la mano, lo exhibía impúdicamente. Mientras comenzaba a manar de su meato una mezcla blanquecina.

Miro un grupo en celo, pongo mi mejor cara, vaso en mano, me muevo, tarareo los temas. Las divinas putonas me evitan. Aún no logro comprender qué es lo que sucita el rechazo.

Surgen de la humareda, dos gorilas. Mueven sus manos con frenesí. Entre llaves y candados salimos despedidos por la puerta, ante caras indignadas de nenas y nenes bien.

Igual, me voy a dormir, porque hoy casi cojo. Esa monjita, va a fluir!

viernes, 13 de agosto de 2010

Viejo puto

La reveldía juvenil, perdón, ¿pero alguien la ha visto ?. Es que se me ha escapado y hace varias décadas que no la hallo por ningún lado.
¿Dónde se manifiesta esa frase, ese cliché?, que repiten hasta el hartazgo personas maduras -con el seño fruncido- en un intento de dar seriedad a dos palabras que nula significancia tienen hoy día.

Internet ámbito por excelencia juvenil, debiera ser el caos, el lugar indómito. Cual volcán en ebullición, impredecible, destructivo. Sepultador de las viejas ideas, muerte y creación. Pero, sin embargo, ¿qué és lo que se puede apreciar?. En su propio hogar, reproduce normas y valores decrépitos. Qué situación más oportuna que el hogar de uno mísmo para vivir su vida como uno le plazca, para comer mientras se caga, para mear en un rincón, para imponer sus reglas.

El hecho más trascendente - que a mi parecer- ha generado la juventud nacional de hoy día es quizá la red de contenidos taringa, pero trágicamente se convirtió en un lugar más del status qou, con reglas y limitantes que arruinan la potencia creativa de la juventud. Las redes sociales en su conjunto no hacen más que reproducir viejos contenidos, nada realmente nuevo logra filtrarse de entre sus muros. Las nuevas tribus sociales en su corazón, todas materialista por excelencia, copias viejas de occidente.

Colonización mental a diestra y siniestra. Florecimiento del género reggae a casi 40 años luego de su punto máximo de popularidad ¿qué és ésto?. No exíste nada peligroso en consumir cultura extrajera, el problema radica en convertirnos en boludos útiles de una causa que nos pase por al lado. El rock que en su momento supo encabezar y ser punta de lanza de todo lo bueno y transformador que puede traer consigo una generación joven. Hoy reposa en el barrio de los acostados.

Facebook, Msn, Twitter, etc. Nos revelan el más claro ejemplo del adormecimiento juvenil o lo falaz de aquella frase acerca la reveldía juvenil. Cualquiera, sin mucho esfuerzo, puede comprobar la línea que siguen todos los adolecentes, la indiferencia (o miedo quizá) al antagonismo, a la confrontación, a la oposición, a todo lo que en un punto los diferencie, los corra a la vereda de enfrente. Porque no crean que usando diferentes atuendos uno manifiesta su disconformidad, no caigamos en los inútiles esteriotipos que bien supo mostrar Capusotto. Un manso boludo con rastas, un rolinga con su chalina, un metalero con sus tachas, un hippie del año 2000, un cadenoso reggaetonero, etc, no son más que lo mismo. No exísten banderas en su corazón

Internet probablemente, en un futuro, sea el medio más poderoso de dominación. Su capacidad podemos verificarla a cada instante, no es necesario ver más que un preadolencete y observar por donde pasa su vida. Caeremos así en cuenta de cómo Internet ha desplazado a la Tv como medio culturizante. Si en una época se imprimían libros, panfletos, clandestinamente hoy día - en caso de existir esa potencia transformadora- contarían con inmejorables armas para escupir todo su parecer

Tal vez Internet sea, lo que la Luna a la Tierra. Ese cuerpo que nos hace girar cada vez mas lento. Tal vez, con Internet la civilización a dado sin querer, con aquella herramienta capaz de sosegar aquellos corazones apasionados, aquellos culos inquietos, aquellos devotos de la discordancia. Y en vez de acelerarse los cambios, volvamos a aquellos tiempos quietos.

martes, 10 de agosto de 2010

Conspiranoia

Distorsión cognitiva grave o el arte - de algunos- de diseminar por entre las voces del pueblo, el desconcierto, la confunción, el caos. Conduciéndonos así, a un estado de alucinamiento que nada tendría que envidiar a cualquier ácido que circula por nuestros días.

Nos llega a través de cualquier forma comunicativa, desde la más primitiva hasta la última moda tecnológica. La raíz del mensaje aún permanece inmutable, aunque a simple vista parezca actual, es más de lo mismo. La dominación del hombre por el hombre.

Ésa sempiterna batalla, ha sido así, quizá, desde el comienzo mismo de nuestra historia. ¿Qué clase de seres superiores seremos nosotros para querer transmutarla?. A pesar de que algunos, con buen tino, podrían objetar tal interrogante con argumentos. Como simplemente echar un vistazo a nuestra civilización actual, aún así lo seguiré sosteniendo. Ésas preguntas metafísicas, siguen siendo tan atrapantes como hace dos mil años, cuando esos griegos primitivos comenzaron a raspar esa nuez cuya corteza podría resultar ciclópea.

Y no solamente atrapantes son esas incógnitas, sino que, sus respuestas -suponiendo que exístieran- son tan escurridizas que solo un puñado de Homo Sapiens han poseído esa destreza divina con la que solo por unos instantes lograron atrapar y contemplar la belleza de una verdad al desnudo .

Bajo estas consideraciones, ¿ cómo no sería posible imaginar que siempre batallamos las mismas batallas?. ¿Cómo no es posible ser un pesimista ante la vida misma?, y si, quizá ella sea una, pero no la única actitud que podríamos tomar a la hora de vivir. Entonces, ¿Cómo - a pesar de ser conciente que la batalla podría ser la misma- estimular y estimularse?, ¿Cómo ayudar a una generación joven caída en un fanático hedonismo yankee por un lado y a ese minoritario grupo "entregado" a la militancia, pero que aún conserva obstinádamente el más repugnante y hediendo buqué noventísta ?.

Porque si no logramos transmutar los valores, no habremos cambiado nada. Todo seguirá el curso similar de la historia. No habremos dejado una marca en la cara de la Ella. Y habremos cumplido con aquella máxima ingenieriana, muchos nacen, pocos viven.

martes, 3 de agosto de 2010

Angelito, me haces reir el culo

Luego de una larga ausencia volvió Angelito. Nos encontrábamos T y yo abstraídos, entre nuestra rutina gimnástica y alguna que otra conversación banal que se filtraba entre serie y serie. Cuando por la escalera, se observa descender una enorme figura masculina, con paso lento y pesado, casi irreconocible a causa de su exagerado vestir. Más allá del cruel invierno, el día no era tan frío como para llevar tanto abrigo, y menos un pasamontañas que solo permitía ver sus grandes ojos negros que parecían salirse de sus órbitas.

T y yo, sostuvimos una mirada cómplice y mientras Angelito se acercaba hacia nosotros -aún sin reconocernos- suspendimos lo que estábamos haciendo para saludarlo. Lo saludamos muy amablemente, simulando interés en cuanto a las razones de su ausencia. Contándole en un breve racconto, la situación actual en el gimnasio, poniéndolo al tanto de las novedades. Aunque en realidad nada había cambiado. Mientras Él comenzó con sus ya legendarios desvaríos. Nosotros, nos dispusimos a prestarle una simulada atención.

Angelito sintiéndose punto de gravitación arrancó sus anécdotas sin ningún prolegómeno. Las palabras se le atascaban en la boca. Sus frases sin ningún sentido, pero casi seguro en su mente sonaban a la altura del individuo más interesante del planeta. Nosotros con la mirada fija en su cara y asintiendo cada una de sus peroratas.

Con su metro ochenta de estatura, alrededor 130 kg, panza prominentísima, cara redonda a la perfección, se asemejaba mucho en su figura al entrañable personaje Shrek. En su mente se podría esconder la genialidad de un loco, o a la sumo, un mitómano muy coherente.

Fue así que nos enteramos de su estadía en Tilcara, donde vivió los últimos seis meses. Cuando dio comienzo al relato, su cara se movió de lado a lado de forma brusca, nosotros simulamos no haberlo advertido y en sus ojos pudimos ver que Él adivinó nuestra inadvertencia. Pero continuó como si nada hubiera ocurrido. El tono de su piel que es blanca, se ruborizó, cada vez más palabras se le atascaban y su frente se tornó brillante debido a la sudoración. Se encontraba en ese punto, en cual uno se siente tan ridículo, que desearia desaparecer.

T hizo una mueca y se mordió la lengua para no reir. Yo no soporté más y comencé a reir a carcajadas, como usualmente sucedía cuando Angelito quería contárnos algo. Ahí estábamos los tres T y Yo sin poder parar de reir, y Angelito poniéndose cada vez más incómodo. Situación a la que todos esperábamos que llegue para reírnos de Él. Pero ésta vez notamos algo distinto. Angelito no era el mismo. Su cara se transformó y nuestra risa paró en seco.

Nosotros también comenzamos a incomodarnos cuando su léxico se hizo incomprensible, la situación se torno casi violenta. Es así que procuré decir cualquier palabra que se me viniera a la mente para destrabar el embrollo y que la atención se dirigiese hacia a mí. Ver si así Angelito lograba tranquilizarse. Fue entonces que dije, - Qué calor que hace! Eso que estamos en pleno junio.- mi mente me había jugado una mala pasada. Al momento que salió la frase recordé que Angelito vestía ridículamente, con un pasamontañas (que ahora lo llevaba puesto como gorro de lana) a pesar de que el día estaba inusualmente agradable.

Fue como echar más leña al fuego, ya no solo estaba rojo, sus ojos irritados y su mano derecha golpeaba exagerádamente su abdomen. Estaba fuera de control. Nuevamente intentó decirnos algo, hasta que comenzó a hablar en un lenguaje que no comprendíamos. Todo su cuerpo se convulsionaba, fueron alrededor de tres minutos de un griterío ensordecedor. Luego sus ojos en blanco y se desplomó en el suelo. Corrí en busca del celular para llamar un ambulancia, en tanto T lo observaba estupefacto.

Nunca supimos que fue lo que vivió en Tilcara, pero luego nos enteramos por los médicos que en su cuerpo se hallaba tatuado el nombre de Viltipoco el más famoso de los jefes omaguacas. A partir de ese día dejó de pronunciar palabra alguna había sufrido un colapso nervioso. Al parecer Angelito habría oído el relato de vida de ese Gran Jefe, su intención, no era otra que la usual. Impresionarnos con sus historias. Que la gente le dispense un poco de cariño, al menos atención.

Nosotros éramos muy jóvenes, pero bastante boludos en ese entonces y solo lo superficial nos preocupaba. Hoy cada vez que me acerco al hospital donde se encuentra alojado y lo observo desde lejos sentado en su banco bajo el ombú, con sus grandes ojos perdidos en la nada, su boca abierta con sus dos únicos dientes, su vestir arapiento y su dejada apariencia. No puedo más que tomarme el abdomen... y ... soltar una carcajada.

martes, 20 de julio de 2010

finales que nunca llegaron a ser finales

Y volví a sentir todo aquello. Luego de tanto tiempo, creyendo que había logrado sepultar de una vez y para siempre todo ese torbellino de sentimientos que me atravezanban haciéndome enmudecer.

Sospechaba que tu presencia iba a ser en cuerpo y alma. Me veía evolucionado.Que en mi ser se había producido un cambio radical y ya nada podía intimidarme. Aunque sea una verdad en partes (como todas las verdades) que mi ser a evolucionado, no estimaba bajo ningún punto de vista tal retroceso.

Llegué puntual como es de costumbre, toqué el timbre y me recibieron los padres de Él, como no podía ser de otra forma. Es así que, los saludé afectuosamente e inicié una charla. Como siempre me gusta hacer con las personas que hace mucho tiempo no veo y profeso cariño. Les conté en un breve relato mi último año. La charla fue muy amena. Acto seguido me dirijo al quincho, donde se encontraban todos incluida Vos. No pude mas que evitarte, y ello no fue instintivo. Yo, ya lo había meditado así, era mi estrategia a seguir. Siempre había sido tan dispuesto; tan francamente amable, tanto te había prestado el oído y tan profundo era mi pesar luego de que te perdía, que había resuelto cambiar. Ser frío y distante para observar tu reacción.

Nos saludamos muy protocolarmente, como es regla general, con las clásicas y a mi sentir repugnantes preguntas y respuestas de ocasión al estilo,- Hola!, tanto tiempo !, todo bien ?, si todo bien, bla bla bla- que le caben de lleno el calificativo de palabras ociosas.
Aunque sabes, cómo siempre intentaba comenzar una charla de forma radical. Huyendo de lugares comunes con el único afán de mantener tu atención, sostener tu mirada. Tu mirada que me hace sentir que existo. Pero esta ocasión no fue así, me empapé del protocolo y lo seguí de principio a final.

Llego el momento de la cena y no puede pasar mas de dos o tres bocados. Todo mi ser estaba al servicio tuyo, aunque hacia fuera, ni el más mínimo indicio se manifestase. Es así, como volví a encerrarme en mí mismo, como me desplacé hacia la seguridad de ese rincón oscuro para dejar ahora de ser yo y convertirme en una sombra más en la mesa.

Dentro de mi estrategia estaba pautado provocar el mínimo contacto visual con Vos. Y así lo hice (aunque me arrepiente) me bastaron dos vistazos para recordar lo que eras y lo que sos. Tus cabellos dorados en bucles que caen hasta tus hombros; tus ojos miel grandes y cómplices, tu pequeña nariz y boca con sus labios finos, tu aire siempre festivo, tu avasallante seducción en fin ese todo que me moviliza no solo el instinto, sino, también el pensamiento razón por la cuál te considero tan especial.

Todo eso es lo que ví, que siempre supe que estuvo ahí. Pero también siempre supe que a pesar de todas esas noches de charlas orgiásticas, de abrazos y caricias sugestivas, de miradas de deseo, de finales que nunca llegaron a ser finales. Siempre supe que nunca lo ibas a poder dejar , que lo que habían sellado era mucho más fuerte, que lo tuyo con migo era simple curiosidad, que lo verdaderamente real te lo provocaba Él. Fué entonces que advertí el anillo en el índice de ambos y con súbito espasmo recordé que había sido Yo padrino de tu boda. Eso fue todo.

jueves, 24 de junio de 2010

Muerte cuántica

Siempre reflota de mi memoria un pensamiento ya familiar. Una tarde de sol, un cielo celeste, una temperatura ideal, en fin, mi preadolecencia.
Esa tarde, me encontraba ensimismado. Con recurrentes pensamientos enfocados en la Nada. Mientras aparentaba practicar un entretenido juego de niño, con la vista de mi madre por la ventana de la cocina haciendo no se qué.
Momento en el cual mi mente cocina la loca idea de, columpiarme sostenido por mis brazos de esa fornida rama de pino que impávida abrazaba mi casa. De modo que di un salto y me precipité sobre ella, con mis brazos en alto y mis manos dispuestas a aferrarse como garfios.
Un instante duró mi algarabía por la hazaña lograda. Todo se esfumó al oír el crujido de la rama, preludio de mis malos cálculos. En tanto que mi cuerpo se balanceaba -sin posibilidad de marcha atrás- hacia adelante. Mis manos firmes y la rama crujiendo hasta que no soportó más y cedió a la presión.
Así como director de cine me ví caer, fueron unos segundos eternos. Inmediatamente las elucubraciones de la mente, calculando cuáles serían las consecuencias de mi proeza. De manera que caía y me veía caer. Hasta creo haber oído antes, el estruendo producido por el occipital al encontrarse con la laja, que haber percibido el contacto de los mísmo.
Como en un torbellino la mente procesaba distintos finales. Temiendo en mayor medida el riesgo a "desnucarme" tan advertido por mis padres, y por ende, mi inexistencia y sus consecuencias si las hubiera. La Muerte aparentaba tener la chance más grande.
Sintiendo el frío suelo bajo mi cuerpo, corroborando todas mis partes intactas, aunque alguna de ellas naturalmente doloridas, me incorporé algo mareado. Fué cuando éste pensamiento imposible emanó de mi mente. Yo había muerto a causa de la caída, pero solamente en un Universo. En los demás aún continúo con vida.