Muchos hablan de traidores, errores táctico/estratégicos, etc, etc. Yo prefiero pensar en términos del amor, -«amar es encontrar en la felicidad de otro tu propia felicidad» Leibniz - la relación amante/amado y en las ideas, que ligan en una u otra forma a la sociedad.
El que ama es incondicional, mientras dure su amor no necesita muestras de reciprocidad por parte de su amado.
"En toda relación amorosa hay, en último término, un devoto y un Dios, un esclavo y un amo." Antonio Gala.
Todo acontecimiento se produce dentro de un contexto que delimitan las "ideas", esas ideas rigen la sociedad. Lo que se perdió durante la batalla "del campo"(de ideas) es la supremacía que tenía el conjunto de ideas que sostenían "el modelo" sobre las demás.
En la batalla del 2001 salimos a andar en bicicleta con el viento de cola nos empujaban las ideas, hasta el amor más irrealizable se nos correspondía. El viento cambió, lo tenemos de frente, ya no somos bellos, aún queda mucho camino para arribar a destino y Bóreas es implacable.
Ellos tienen el viento de cola ahora. Lo agradable de viajar viento de cola es que cualquier individuo puede estar al frente del pelotón, la resistencia es mínima. Hasta ese último orejón del tarro puede pasar al frente.
La táctica si se quiere ir viento en contra es poner el más robusto y fuerte al frente, para que luche contra el viento permitiendo continuar a los más débiles. El pelotón se convierte en una linea. Se podrá seguir avanzando, pero si el viento se hace intratable hasta el fuerte cae vencido.
Hablar de táctica cuando los vientos son huracanados tiene poco sentido.
Este viento de cambio ha embelesado a la mayoría de la sociedad con sus ideas y la arrastra, ella va a ser "el amante" de cualquier individuo que por X circunstancia se ponga al frente del pelotón, va a ser incondicional, hasta la próxima llegada del Céfiro.
1 comentario:
Puede que sea una cuestión de suerte.
También suma que el oficialismo nacional hizo todos los deberes para que esto ocurra.
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