domingo, 23 de junio de 2013
Don't tell me how to feel (motherfucker)
(voy a intentar hacer una explicación decepcionante) . Me imagino que es algo que le pasa a todas las personas que tienen una conexión a partir de alguna forma de comunicación, al desaparecer muchas de las barreras que generan interferencia entre lo que sentimos/decimos y oímos/sentimos aquello que se comparte, sea lo que sea, se carga en el receptor con muchos más bits de información, como escuchar música con baja calidad de mp3 en relación contra una que sea de máxima. Todo aquello que te atraviesa el cuerpo (de alguna manera inexplicable) significaría algo así como lo que es la cocaína más pura para un falopero una esssplosión. Con esta conciencia de soledad en la que vivimos, cuando recibimos esa dosis, es tan zarpada que se rompe, si existe, tu subjetividad. Y aún siendo consciente de tu subjetividad y soledad tenes destellos, pequeños chispazos o grandes fuegos artificiales de que por un instante estas masas rodeadas de piel y aisladas por intermedio de ella de manera fatídica con el afuera, en un puto punto [o, en el milagroso punto de contacto], se rozan los límites en los que más de uno coinciden con la misma coordenada cartesiana y así como fluye la sangre por las venas fluye aquello entre las masas rodeadas de piel que se intersectan.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Chomsky y su lenguaje transformacional nos cuentan bastante acerca de nuestras representaciones internas y el modo en que distorsionamos, eliminamos y generalizamos. Y también cómo desandar esas eliminaciones, distorsiones y generalizaciones que enmascaran nuestro mundo interno para protegerlo e vaya saber quién o quiénes. Intuyo que de nosotros mismos.
Lo que son las representaciones internas...que donde leo: "un puto punto", traduzco: "el milagroso punto de contacto".
Y es que todo depende del cristal con que se mire, claro.
Saludos!
Piscuiza
Su traducción es muy mucho mejor.
En este momento la agrego.
Es cierto, el cristal.
Saludos.
Publicar un comentario